Cómo ser la perfecta invitada de una boda en verano

Nos ha llegado el tarjetón y vemos que la próxima boda será en pleno verano. ¿Qué ponerse para no pasar calor y además, estar a la última? Sin duda lo de pasar calor es inevitable, sobre todo dependiendo en qué lugar de España nos encontremos en el momento de la boda, pero eligiendo el look adecuado, podremos mitigarlo un poco. Así que, atentas a este primer repaso de las tendencias de bodas chic en verano, que dedicamos a las mujeres.

En primer lugar hablaremos de los materiales, porque ni decir tiene que serán lo más ligeros y frescos posible. Por eso, los diseñadores apuestan por tejidos naturales como linos o algodones, que además de sentar perfectamente, nos aportan un toque de frescura en los vestidos.

Diseños vaporosos, con transparencias y con encajes, harán que las fibras naturales por las que hemos apostado, ayuden aún más a que por nuestro cuerpo corra un poco más el aire y mantener el tipo ante el calor de la boda.

Ya tenemos el tejido, ahora vamos al diseño. Si la boda es por la mañana, huye de la largura del vestido, obviamente, pero en este caso nos referimos a que apuestes por un mini vestido cóctel, llegando a lucir faldas con un largo por encima de la rodillas. Manga corta o tirantes admitidos, por supuesto, e incluso, una manga francesa.

Los colores, cuanto más claros y con pocos brillos mejor, es más, deja los destellos para una boda nocturna. Y ya que hablamos de bodas por la noche, un look que nos viene siempre bien tanto para bodas de día como de noche es apostar por dos piezas, es decir top más falda o top más pantalón. Si optamos por falda, que sea en forma de trapecio y corte en A, es lo más in del momento. Si son pantalones, que sean anchos y muy ligeros. En estos outfits podremos elegir color-block, unir colores complementarios, pero siempre dentro de la coherencia y buen gusto. Una apuesta genial es el blanco y negro o degradé.

Y ya metidos en bodas nocturnas, aquí jugaremos a ser las estrellas de la noche, pero ojo con quitarle el protagonismo a la novia. Para ellas, huye del blanco, a no ser que lleves un vestido con claro corte cóctel como esta opción que nos ha encantado de Apparentia, ya que es el único diseño que podría ser blanco además de la novia.

Si optamos por traje corto, atrévete con lentejuelas de colores noche como el azul zafiro o el granate. Apliques de plumas o volantes en las faldas.

Pero si por contra queremos ir de largo, vigila no pasarte y apuesta por faldas en trapecio, más cortas por delante, estamos en verano y nos podemos permitir el lujo de lucir palmito. Así que hombros descubiertos, o sólo uno de ellos, mangas cortas y largos que permitan ver un poco de pierna. Este mono de Apparentia es perfecto para explicar el concepto.

El look años 50 vendrá que ni pintado para las bodas de noche, con faldas rematadas con apliques o encajes. Y si sois más atrevidas, un mono con transparencias, o sin ellas, pero de corte ajustado.

En contra punto, se puede jugar a ser un espíritu libre y bohemia con vestidos largos de diseño naif, con mangas a todas las alturas, desde los tirantes hasta la manga larga. Eso sí, estos vestidos serán sueltos, vaporosos, frescos y con diseños muy divertidos.

Y acabamos con otro dilema, qué ponernos en la cabeza. Pues sencillo, apuesta por los tocados naturales, llenos de hojas o flores. La rafia, como tejido natural es un must este verano. Y si sois más de sombrero, pues una pamela XL que nos de sombra y alivie el calor, recordar que solo hay que cubrirse la cabeza con una pamela por el día.

Y estos son, en grandes rasgos, lo que se lleva esta temporada para las bodas en verano. En la próxima entrega, veremos como pueden ir ellos de etiqueta sin pasar demasiado calor.

Si estás interesada en alguno de los diseños de este artículo o quieres conocer más, puedes hacerlo en la web de Apparentia donde encontrarás estos y otros modelos exclusivos para la ceremonia a la que estás invitada este verano.

Imágenes: Apparentia