La auténtica historia de la Navidad y sus tradiciones
La Navidad tiene orígenes muy distintos, aunque, naturalmente, tal y como la celebramos en Valencia tiene unas raíces muy religiosas. Pero a ellas se le unen otros lazos de leyendas, mitos y hasta costumbres, que hemos heredado a la hora de poner el Belén, el árbol, de indicar que son tres los Reyes Magos de Oriente o de llamar Papá Noel a Santa Claus. ¿De dónde vienen todas estas figuras, personajes y demás? En You Valencia vamos a tratar de sacaros de dudas, aunque no será fácil. Porque, en realidad, ni siquiera podemos probar cuál es el día exacto del nacimiento de Jesús.
Si bien es cierto que se fijó el 25 de diciembre, día próximo a muchas fiestas del solsticio de invierno que se celebran en la actualidad. ¿Y quién lo fijó? A mediados del siglo IV, el Papa Julio I estableció esta fecha, basada además en el conocimiento de que sucedió durante el reinado de Herodes. Pero ésta no es la única figura que ha podido sufrir un cambio o evolución de la realidad. Papá Noel, también llamado Santa Claus, Sinterklaas o Père Noël -padre de la Navidad, en francés- o San Nicolás, está inspirado en la vida del obispo de Myra (no confundir con el famoso pueblo de Cuenca, Mira), en la actual Turquía, conocido hoy como San Nicolás, cuyo Santuario se haya situado en la ciudad italiana de Bari.
Y es que este obispo fue muy popular por su bondad y generosidad con los pobres, especialmente con los niños, porque siempre ofrecía todo lo que tenía con los más necesitados. El escritor inglés Clemeent Moore, imaginó a Papá Noel en un trineo tirado por ocho renos, Antes de esto, Papa Noel repartía sus regalos a pie o quizá montado en un caballo. Su figura no siempre tuvo la imagen universal que hoy conocemos. En 1931, la empresa Coca-Cola le encargó al diseñador Haddon Sundblom que dibujara a un Papa Noel para su campaña navideña, con la imagen que tenemos ahora… y luego ya nadie ha podido cambiar esta forma, aunque ha habido algunos intentos, especialmente por dotarlo de otro color, como hiciera la empresa telefónica Amena en España.
Y con Papá Noel llega, sin duda, la historia del árbol de Navidad que, en cambio, tuvo su origen en una leyenda europea. Se dice que durante una noche fría de invierno, un niño buscó refugio en la casa de un leñador y su esposa, que le recibieron y le dieron de comer. Durante la noche el niño se convirtió en un ángel vestido de oro, era el niño Dios. Para recompensar la bondad de los ancianos, tomó una rama de un pino y les dijo que la sembraran, prometiéndoles que cada año daría frutos. Y así fue, aquel árbol dio manzanas de oro y nueces de plata.
Fue San Francisco de Asís, quien popularizó la costumbre de armar un pesebre y en su viaje a Belén en el año 1220, quedó asombrado por la manera de cómo se celebraba allí la Navidad. Fue entonces, cuando regresó a Italia, que pidió autorización al Papa Honorio III para representar el nacimiento de Jesús con un pesebre viviente. A partir de ese momento, la tradición se extendió por Europa y, luego, por el resto del mundo. A principio del Siglo IV aparece Cristo en un pesebre y había solamente un buey y una mula y a finales del Siglo IV se agregan una estrella y a la Virgen María, solo a partir del 431 con el Concilio de Éfeso, aparece el centro de la imagen.
En el Siglo V el Papa San León estableció que eran los Reyes Magos que fueron a adorar al niño guiados por una estrella: Melchor, Gaspar y Baltasar y llevaron oro, incienso y mirra. Poco después, además, se concretó que Baltasar se representaría con un Rey negro. ¿Y qué hay de los Reyes Magos? En el Siglo XII, la tradición católica de San Nicolás se expande por Europa, como hemos comentado, mezclándose con celebraciones similares. En el Siglo XVII, emigrantes holandeses llevan la tradición a Estados Unidos; y en España se convierte en los Reyes Magos donde, desde allí, se difunde hacia Latinoamérica.
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