El Grupo de Referencia del Festival de la Canción de Eurovisión ha aprobado esta decisión, que ayudará a los cinco países del llamado Big Five, y en el que se encuentran, además de España, Italia, Francia, Reino Unido y Alemania. Son el grueso de Eurovisión, los cinco países que más contribuyen, económicamente hablando, a que se pueda celebrar cada año el certamen. Y, por ello, desde 1999, estos cinco países (otrora cuatro, cuando Italia no participaba) tienen el pase asegurado a la gran final del concurso. Un «regalo» envenenado, que ha sido muy cuestionado.
Pero lo que sí es cierto es que este grupo de los cinco, al que se suma cada año el país anfitrión (y ganador de la anterior edición), tiene menos «fenómeno fan», ya que mientras que la audiencia puede ver en directo dos veces a cada país, estos seis países solo pueden mostrar sus armas en directo en una ocasión, y también hay menos margen de corrección y de locura eurovisiva. De esta manera, Eurovisión 2016 marcará un hito, y permite al Big Five y al país anfitrión actuar también en las dos semifinales, de manera separada (tres en la primera, tres en la segunda) y teniendo igualmente su pase asegurado.
Ahora lo que le falta a España es tener representante para Eurovisión 2016. Porque ya ha confirmado su participación, algo que todos esperábamos sin mayor complicación, pero todavía no ha informado acerca de cómo se elegirá a su candidato ni de quién puede tratarse. El año pasado, Radio Televisión Española (RTVE) escogió directamente a Edurne y a su canción, Amanecer, con la que quedamos en el puesto número 21º de la tabla de los 27 países que compitieron este 2015.
Imágenes: Eurovision.tv