Las jirafas Barnigo, (Giraffa camelopardalis rothschildi), son una de las más protegidas ya que se encuentran en peligro de extinción. El reciente papá, Julius, es el único ejemplar macho adulto que está en Bioparc, por lo tanto el padre del resto de crías que han nacido en el parque.
La destrucción del hábitat y a la caza furtiva son el principal detonante para que las Barnigo atraviesen esta sotiuación de extinción, aunque se sigue trabajando para la perpetuación de la especie, aunque sea en cautividad. Según los últimos dos, hay menos de 1.5000 individuos viviendo en la región central de Kenia, norte de Uganda y sur de Sudán. zonas geográficas de esta especie. Así, el nacimiento de la nueva cría está inmersa en esta importante iniciativa de preservación de la biodiversidad.
En cada parto habitualmente nace una sola cría y suelen durar unos 45 minutos después de romper aguas. El periodo de gestación de las jirafas es de 15 meses y medio y el de lactancia puede alargarse un año, aunque a las pocas semanas comienzan a mostrar interés por el alimento sólido. En esta ocasión, el parto se produjo durante la noche y el equipo de cuidadores de Bioparc, que ya se encontraba alerta por el avanzado estado de embarazo que presentaba la hembra, descubrió esta «buena nueva».
Imágenes: Bioparc