Valencia recibe este verano al artista sevillano Luis Gordillo con una muestra que es pura Fotoalimentación, porque el Centre del Carme Cultura Contemporània presenta una exposición organizada por el Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana en colaboración con el Museo de Arte Contemporáneo de Alicante (MACA), esta exposición constituye el regreso del pintor sevillano al territorio valenciano, después de 25 años. Luis Gordillo es una de las figuras más influyentes y punto de referencia esencial del arte español del último medio siglo. La exposición, que podrá verse en el Centre del Carme hasta el 1 de septiembre, ahonda en el Gordillo más cercano a la fotografía a través de 150 piezas de los años 70.
La trayectoria de Gordillo es motivo de inspiración y un referente para las próximas generaciones. El director del Centre del Carme ha agradecido la presencia del artista tanto en la inauguración de esta exposición que tuvo lugar en Alicante el pasado mes de octubre, como ahora en Valencia. Pérez Pont ha señalado que «el público que nos visite en los próximos meses va a tener la oportunidad de acercarse al Luis Gordillo más experimental, una propuesta que convive con el repaso a la trayectoria de otro referente del arte valenciano como es Xisco Mensua o la investigación artística de Andrea Corrales, la exposición colectiva Zoextropia, además de los festivales Tercera Setmana, de artes escénicas, o Vociferio de poesía».
Gordillo utiliza desde principios de los años 70 la fotografía con la finalidad de encontrar otras opciones al color dominante en su pintura, con el objetivo de abrir una investigación neutralizadora de su utilización violenta de colores complementarios. La exposición Luis Gordillo. Fotoalimentación muestra dos etapas con claras diferencias: una primera con el trabajo fotográfico de los 70, casi en su totalidad en blanco y negro, y otra posterior donde ya aparece el color y la utilización de la nueva tecnología digital que le abre a Gordillo un campo casi infinito a la experimentación.
El artista ha explicado que «en los años setenta empleé la fotografía en blanco y negro con numerosos propósitos, pero quizás el más importante y el que he mantenido a lo largo del tiempo, es el de analizar los elementos orgánicos de la pintura, neutralizando y cosificando el gesto». «En la actualidad trato de crear espacios en los que la pintura y la fotografía dialogan e interactúan entre sí; intento articular maneras para la expansión de la fotografía en mi obra», ha manifestado el creador sevillano, quien ha añadido que «me sigue interesando primordialmente la pintura como interrogación corporal; no obstante, la intervención técnica de la fotografía crea una tensión dialéctica, un espacio mental en crecimiento».
Imágenes: Centre del Carme – Luis Gordillo