Los Jardines de Viveros renuevan su cara con una nueva plaza
Los Jardines de Viveros y el Museo San Pío V nunca han estado tan cerca como esta mismo verano. Dos espacios llenos de belleza, de armonía y perfectamente conectados entre sí. Tanto, que finalmente el Ministerio de Cultura ha aceptado «eliminar» el antiguo muro trasero del museo de Bellas Artes de la capital del Turia, por lo que, muy pronto, la segunda pinacoteca más importante de España conectará de manera directa con los Jardines del Real, que es el nombre auténtico de nuestros populares Viveros. Porque, según informa el Ayuntamiento de Valencia en un comunicado, tras derribar este muro quedará «como un espacio diáfano» que conectará con Viveros pero, ¿cómo?
Según ha podido saber esta revista, se procederá a la urbanización de una plaza entre ambos espacios, tal y como han expresado fuentes del consistorio valenciano, que se han vanagloriado de que se apruebe esta modificación del Plan Especial de Protección del BIC, Bien de Interés Cultural (PEPEBIC) del Museo de Bellas Artes, San Pío V, cuyas obras de urbanización del entorno ya han concluido. Y, ahora, llega esta gran solución del Gobierno que pedía el Ayuntamiento de Valencia: eliminar el antiguo muro, que ya no será sustituido por otro.
«No sólo recuperamos espacio público y eliminamos un área que sufría degradación, sino que también se abren todas fachadas del museo al espacio público, lo que permitirá tener una visión completa del edificio, sin ninguna fachada tapada por un muro. Esto supone recuperar la zona construyendo espacio accesible para toda la ciudadanía», han destacado estas fuentes. En efecto, las obras de esta nueva plaza para los Jardines de Viveros permitirán que todos los vecinos y turistas puedan ver el museo al completo, desde todas sus caras, y potenciarán los Jardines del Real, también llamados jardín de Viveros, este parque público urbano que toma su nombre del Palacio Real situado en su interior hasta 1810.
Su otra denominación, de Viveros se debe al nombre de «huerta de Vivel» con el que se conoció en el pasado y que hacía referencia a una laguna, o vivero, que le suministraba agua de riego y en cuyo interior se sitúa el Museo de ciencias naturales de Valencia, un edificio racionalista obra de Luis Gay, con una amplia colección de fósiles.
Imágenes: Ayuntamiento de Valencia – (cc)
